Camila y sus amigos se enteran de que hay un tesoro escondido en alguna parte de su escuela. Mientras investigan, todos se quedan desconcertados cuando escuchan ruidos extraños que vienen del sótano. No pueden ser gritos, ¡¿verdad que no?! Así que envían al gato de Gary Petrie con una cámara amarrada al cuello para que grabe un video del sótano y cuando lo ven... ¡Ay nanita! Hay una BESTIA en el sótano ¡Y QUIERE COMÉRSELOS A TODOS!